Artigas, Belgrano y Güemes

Héroes de las Provincias Unidas del Río de la Plata

Por Carlos Emilio Biscay

José Artigas (Montevideo, 19 de junio de 1764 – 23 de septiembre de 1850), Manuel Belgrano (Buenos Aires, 3 de junio de 1770, 20 de junio de 1820) y Miguel de Güemes (Salta, 8 de febrero de 1785 – Salta, 17 de junio de 1821).

Junio trae consigo un fin de semana largo en ambas riberas del Río de la Plata motivadas por tres importantes efemérides: un nacimiento y dos fallecimientos, o más bien, sus pasos a la inmortalidad. Artigas es especialmente recordado en Uruguay y en algunas provincias argentinas que formaron parte de la Liga de los Pueblos Libres, mientras que Belgrano y Güemes tienen efemérides nacionales en Argentina y son menos conocidos en Uruguay. El 19 de junio se conmemora el Día de la Bandera en Uruguay y en la provincia de Entre Ríos, y el 20 de junio se honra la memoria de Belgrano en Argentina. Los tres son héroes del Río de la Plata, y sus contribuciones a los primeros días de nuestra independencia trascienden las dos repúblicas actuales. ¿Podemos imaginar qué hubiera de nuestra Patria sin estos tres hombres? Por lo tanto ,no deberíamos mencionar a uno sin reconocer la necesidad de los demás.

Artigas, en la Banda Oriental, liberó su Provincia de los realistas y se plantó como una barrera contra las aspiraciones portuguesas sobre estos territorios. Martín Güemes fue una barrera en el norte contra los realistas en Salta. Rechazando seis invasiones españolas según los planes trazados por San Martín en su campaña de liberación. San Martín dijo: «Los gauchos de Salta solos están librando una guerra de desgaste tan feroz contra el enemigo que se vieron obligados a enviar una división solo para extraer mulas y ganado». Güemes también tuvo que resistir a los ejércitos porteños y a las luchas internas que intentaban derrocarlo. Con razón se dice que Güemes es el Artigas del norte, ya que ambos hombres enfrentaron dificultades y conflictos similares y tuvieron el mismo destino de exilio y muerte.

Los tres se conocieron y se relacionaron entre sí. Artigas y Güemes llevaron vidas paralelas: tuvieron que enfrentarse en el norte a los portugueses y a los españoles respectivamente, al sur los embates de las tropas porteñas que buscaban doblegarlos y además también a las intrigas y conspiraciones de los propios compatriotas. 

Güemes, cuyas últimas palabras antes de morir fueron «Voy a dejarlos, pero me voy tranquilo, porque sé que ustedes, que han dado pruebas de valor, sabrán defender la patria», y Artigas sufrió traición y se vio obligado al exilio en Paraguay. Cuando fue invitado a regresar a la joven República Oriental, se negó diciendo: «Ya no tengo Patria».

Belgrano va a morir enfermo y en la pobreza en Buenos Aires, su muerte va a transitar el mismo día en que nos debatimos en la anarquía. Aquel hombre que siendo un civil se había puesto el uniforme de militar y había ido a luchar por el sueño de mayo, no fue ajeno en sus últimos momentos a la desdicha de ver que todo se perdía y en su último suspiró exclamó  ¡Ay, Patria mía!…

Belgrano fue el “amado Jefe” para Artigas en su “Proclama de Mercedes” en la Banda Oriental dando inicio a la campaña que terminó con la Batalla de las Piedras. Esta tensión entre dos frentes, los españoles-portugueses y porteños es bien explícita y se refleja en esta carta de Artigas a Güemes del  5 de febrero de 1816 y entre los párrafos les expresa: “Estoy informado de su carácter y decisión y ello me empeña a dirigir a Ud. mis esfuerzos por este deber: Contener al enemigo después de la desgracia de Sipe-Sipe debe ser nuestro principal objeto. Por acá no hacemos menos esfuerzos por contener las miras de Portugal. Este gobierno rodeado de intrigantes duplica sus tentativas pero halla en nuestros pechos la barrera impenetrable. La fría indiferencia de Buenos Aires y sus agentes en aquella corte me confirma de su debilidad. Nada tenemos que esperar sino de nosotros mismos. Por lo tanto es forzoso que nuestros esfuerzos sean vigorosos y que, reconcentrado el Oriente, obre con todos sus recursos.”  Carta de Artigas a Güemes.” (5 feb 1816) 

Hubo algo común a los tres y que aún perdura flameando “alta en el cielo” como “un águila guerra”. El día 27 de febrero de 1812 Manuel Belgrano decide inaugurar las baterías ·”Libertad e Independencia” donde hoy se ubica el Monumento Histórico Nacional a la Bandera a orillas del Paraná”. Como se encuentra con la necesidad de enarbolar bandera, escribe un oficio al gobierno diciéndole: “siendo preciso enarbolar bandera y no teniéndola la mandé a hacer blanca y celeste conforme los colores de la escarapela nacional”. Además de esto, Belgrano hace un discurso a toda la tropa en los términos que les dice:

“Soldados de la patria juremos vencer a nuestros enemigos interiores y exteriores y la América del Sur será el templo de la independencia, de la unión y de la libertad. En fe de que así lo juráis decid conmigo Viva la Patria”.

Podría parecer, por el desenlace de estos hombres, la imagen de tres derrotados. Uno murió asesinado, el otro enfermo y el tercero debió exiliarse, pero nada más lejos de esto. Realizaron aquella máxima del Evangelio: “si el grano de trigo al caer en tierra no muere, queda él solo; pero si muere, da abundante cosecha”.

Estos tres héroes son parte esencial de nuestra historia y su legado perdura en el recuerdo de nuestros países. Son ejemplos de valentía, lucha por la libertad y defensa de los derechos de los pueblos. En junio, honramos su memoria y recordamos su sacrificio en aras de una América del Sur libre e independiente. 

Renovemos por ellos el juramento de fidelidad a nuestra Banderas acariciadas todas por el pampero, símbolo de las cosas que valen la pena vivir. Imitemos sus virtudes de amor a la Patria, abnegación y fortaleza antes las dificultades, para que sus sacrificios no hayan sido en vano y la cosecha sea abundante.

Canciones y Marchas alusivas a las efemérides

Salud a la Bandera (Ar).Fabiana Cantilo

Canción a la Bandera Uruguaya (Uy). Daniel Deniesse.

Marcha Mi Bandera – (Uy)

Marcha Mi Bandera – (Ar)

Homenaje a Martin M. de Güemes (Ar) – Jorge Cafrune

A Don José, (Uy) Alfredo Zitarrosa

Zamba al General Belgrano  (Ar) Sebastián Matthews

Otras fuentes:

Gabriel Di Meglio, (2020) «Sin la Guerra Gaucha, la Independencia no podría haber sido ganada”

«Hacedores de la Patria»: Güemes, Artigas y Belgrano homenajeados en Jesús María

Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 41

Junio de 1823

7 de junio

Segunda Campaña de Intermedios – Toma de Arica

Retomando el plan de la Primera Campaña de Intermedios, el ejército peruano, bajo el mando del general Andrés de Santa Cruz, desembarcó en los «puertos intermedios» del sur del Perú y se adentró hasta el Alto Perú (actual Bolivia), región dominada por las fuerzas realistas al mando del virrey José de la Serna. Tras la indecisa batalla de Zepita, los patriotas se vieron abrumados por el masivo ataque realista y retrocedieron a la costa, logrando los sobrevivientes embarcarse a duras penas. La campaña se inició con el asalto y la captura de Arica por parte del contralmirante Guise, el 7 de junio de 1823. El 11 de junio llegó a ese puerto el general Santa Cruz, que continuó rumbo a Iquique para dirigir las operaciones de desembarco de las fuerzas patriotas. Luego, los patriotas ocuparon sucesivamente Tacna y Moquegua, puntos donde permanecieron mucho tiempo, con el que se perdió el factor sorpresa. Recién en julio, los patriotas, divididos en dos grupos, avanzaron al Alto Perú: el 8 de agosto Santa Cruz ocupó La Paz y el 9 de agosto Gamarra hacía lo mismo con Oruro. 

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Segunda_Campa%C3%B1a_de_Intermedios

16 de junio

Lecor Contesta a Mansilla

Lecor, que ya era práctico en este ramo de las protestas e intimaciones sin ulterioridades de ninguna especie, contestó desde su cuartel general de la villa de Guadalupe el 16 de junio de 1823, que no reconocía al General Mansilla “autoridad para ingerirse en los negocios de una provincia de la Confederación del Imperio”.

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3 

18 de junio

El general realista Canterac ocupa Lima durante un mes; el gobierno y el ejército patriotas se instalan en el Callao.

El 2 de Junio, abandonaron los realistas sus acantonamientos de Jauja, y descendieron al valle de Lurín, alcanzando a entrar en la ciudad el día 18 de Junio.

Los españoles, ingresaron como en un país conquistado. Riva Agüero había ordenado que se enviase al Callao cuanto dinero había en las cajas fiscales, los archivos y aun la plata labrada de las iglesias, la que en ellas quedaba, después de las anteriores depredaciones, pero Canterac se dio maña para desvalijar a los vecinos de Lima, exigiendo del comercio medio millón de pesos, imponiendo cupos de dinero o de especies, obligando a los arrendatarios a pagar por adelantado los arrendamientos, sustrayendo de los templos lo que se podía transportar y se juzgaba de algún valor, y de la Casa de Moneda todos los artefactos que podían serle útiles, añadiendo a todo esto el insulto y el atropello. La Gaceta del Gobierno del 19 de Julio, resumiendo este cuadro de horrores, decía: “Lima ha visto a los españoles apoderarse de su recinto, desnudar los templos, saquear las casas, violentar el sexo, quemar sus fábricas, insultar a sus habitantes, derramar la sangre de los sacerdotes e inocentes y devastar sus campos. Ha visto…, pero un cuadro tan lúgubre quede siempre cubierto de un velo denso y sólo se descorra cuando se trate de convencer que Lima aún no ha comprado su libertad al precio que la libertad tiene”.

La ciudad de Lima es ocupada durante estos dos días por las fuerzas realistas dirigidas por el general realista José Canterac. El congreso peruano, refugiado en la fortaleza de El Callao, destituye a Riva Agüero del mando político (día 23) y nombra en su lugar al general Sucre. Riva Agüero huye a Trujillo, donde establece la sede de su gobierno (26 de junio). El congreso peruano pide a Bolívar que viaje a Perú.

Fuente

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3 

19 de junio

Rivera fija su posición del momento en un oficio que manda al Cabildo de Montevideo, que había requerido sus servicios como oriental y militar sagaz, buen conocedor de la campaña. “V.E. se decide y me invita a defender la libertad e independencia de la Patria, y felizmente estamos de acuerdo en principios y opiniones… La diferencia entre V.E. y yo en la causa que sostenemos sólo consiste en el diverso modo de calcular la felicidad común a que ambos aspiramos. V.E. cree que el país será feliz en una independencia absoluta, y yo estoy convencido de que sólo puede serlo en una independencia relativa; porque la primera, sobre imposible, es inconciliable con la felicidad de los pueblos… Para establecer la independencia absoluta de la Banda Oriental, necesita V.E. hacer la guerra y triunfar del Imperio, mantener el orden interior y evitar la anarquía después de haber triunfado”…

Fuente:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3 

25 de junio

Reconocimiento de la Independencia de Brasil de Portugal

Rivadavia  envió  al  ministro  de  Relaciones  Exteriores  brasileño  la  siguiente  nota,  archivada  en los registros históricos argentinos bajo el siguiente título: “N.º  251.  –  [Al  Ministro  de  Estado  y  Relaciones  Exteriores  del  Brasil,  celebrando  la  independencia  de  su  nación,  y  le  anuncia  el  envío  de  la  misión  Valentín  Gómez  a  fin  de tratar definitivamente la evacuación de la Banda Oriental]. Buenos Aires, 25 de junio de 1823 Il.mo e Ex.mo Señor,El Ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores en el estado de Buenos Aires tiene el honor  de  dirigirse  a  S.  E.  el  Excelentísimo  Señor  Ministro  de  Estado  y  Relaciones  Exteriores  del  Gabinete  del  Brasil,  haciéndole  presente para que se digne elevarlo al conocimiento de su Gobierno Que  su  Gobierno  ha  celebrado  con  la  más  plena   satisfacción   la   Independencia   del   Brasil, y el establecimiento de un Gobierno que satisface sus necesidades, y más justos votos–” 

Rivadavia da instrucciones al delegado Pbo. Valentín Gómez ante la Corte de Río de Janeiro, para que logre un doble objetivo: mejorar las relaciones políticas entre las Provincias Unidas y el Brasil, y pedir que éste abandone la Prov. Oriental, dejando a un lado sus pretensiones de incorporación al Imperio.

Fuentes;

https://www.gov.br/mre/pt-br/media/artigo-argentina.pdf/view