Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 45

Octubre de 1823

Bernardino Rivadavia comisiona al Gral. Soler para que establezca las bases de un armisticio entre Lecor, da Costa y el Cabildo Representante, mientras se esperan los resultados de la gestión de Gómez. En esos momentos se estaba gestando un acuerdo honorable entre Lecor y da Costa en la disputa por Montevideo.

1 de octubre

Fernando VII – Restauración absolutista

Se denomina Década Ominosa o segunda restauración del absolutismo (1823-1833) al periodo de la historia contemporánea de España que corresponde a la última fase del reinado de Fernando VII (1814-1833). 

Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%A9cada_Ominosa 

8 de octubre

Definitiva pérdida del sur del Perú en el Combate de Arequipa.

El combate de Arequipa fue un enfrentamiento bélico de la guerra de independencia peruana, ocurrido el 8 de octubre de 1823 en la ciudad de Arequipa, durante el cual la caballería independentista al mando de los generales Sucre y Miller que había quedado en la ciudad tras el reembarque de su infantería fue soprendida y derrotada por las fuerzas realistas al mando de los brigadieres Ferraz y Antonio Tur. 

https://es.wikipedia.org/wiki/Combate_de_Arequipa

9 de octubre

Firma del Memorandum Polignac

Canning convence al Ministro de Relaciones francés, príncipe Auguste Jules Armand de Polignac, que ante la inevitable independencia de Hispanoamérica era inútil apoyar a Fernando VII en su ambicioso proyecto militar de recuperarla. 

Fuentes:

https://es.wikipedia.org/wiki/Memor%C3%A1ndum_de_Polignac

https://dokuklik.euskadi.eus/badator/visor/060/02348

13 de octubre

Cabildo de Montevideo plantea a la Asamblea Legislativo-Constituyente del Brasil, que se reconozca la independencia de la Provincia Cisplatina

El Cabildo de Montevideo plantea a la Asamblea Legislativo-Constituyente del Brasil, que se reconozca la independencia de la Provincia Cisplatina y en virtud de esto, que sean los vecinos quienes en uso de su libertad y a través de sus “legítimos representantes” opten por decidir “sus destinos como mejor les conviniese. El Cabildo Representante terminaba exigiendo el retiro de las tropas brasileñas, el embarque

de la división portuguesa de voluntarios reales, y, por último, que “los habitantes del Estado quedasen en absoluta libertad de fijar por medio de sus legítimos representantes, sus destinos como mejor les conviniera.” (Acta Capitular inédita de 13 de octubre de 1823).

Fuentes:

http://www.museohistorico.gub.uy/innovaportal/file/127264/1/29-tomo-x—no.-29.pdf 

20 de octubre

el Congreso Cisplatino de 1821 había sido insanablemente nulo

Cabido abierto de Montevideo «Oragniza la resistencia a Lecor y declaró que: » el Congreso Cisplatino de 1821 había sido insanablemente nulo…    «»el Congreso Cisplatino de 1821 había sido insanablemente nulo por vicios de la elección y por haber actuado bajo la coacción y las sugestiones de Lecor… se violaron los antecedentes nacionales, naturales y políticos de la Provincia Oriental que ha sido siempre argentina»».        La insurrección produjo entusiasmo en toda la Banda Oriental y en los antiguos Pueblos Libres. Estanislao López y Mansilla pidieron a Buenos Aires armas y dinero para ayudarles, que hubiera sido relativamente fácil por estar Lecor con pocas tropas y encontrarse los ejércitos y escuadra brasileños ocupados en la represión de Pernambuco, Bahía y Pará. Pero Rivadavia era pacifista, o no quería distraer dinero en una guerra. Se limitó a nombrar una misión que fuese a Río de Janeiro a reconocer a Pedro I y pedirle buenamente la devolución de la Provincia Oriental; el comisionado era Valentín Gómez con Esteban de Luca como secretario.

Mientras tanto Lecor, desde San José, conseguía el acoso del caudillo de la campaña Fructuoso Rivera, antiguo compañero da Artigas pasado a los invasores. «»También consiguió que el Banco de Buenos Aires diese oro contante para armar sus tropas como hemos visto antes 6.»

25 de octubre

«Comunicado del Cabildo de Montevideo al gobernador de Buenos Aires, Gral. Martín Rodríguez, de la decisión del Brg. Gral. portugués Alvaro da Costa de embarcar sus tropas (la División de Voluntarios Reales) para Lisboa por orden del rey Juan VI.  En consecuencia la plaza de Montevideo sería entregada a las fuerzas de Lecor.»

29 de octubre

Declaración del Cabildo de Montevideo

«Reunión extraordinaria del Cabildo con la asistencia de Manuel Pérez, Pedro Francisco Berro, Pedro Vidal, Francisco de las Carreras, Silvestre Blanco, José María Platero, Ramón Castriz y Juan Francisco Giró, para considerar la situación a la lectura del oficio de da Costa que se desentendía del futuro político de la Provincia sin respetar el acuerdo firmado (enero 20 de 1817) por el que se convenía que: “en cualquier caso que esta plaza sea evacuada por las armas portuguesas, serán entregadas sus llaves al Cabildo”. El Cabildo de Montevideo en reunión celebrada, resuelve ponerse “bajo la protección” del gobierno de Buenos Aires.

Categórica afirmación del Cabildo de Montevideo ante la situación que declara: “nulo, arbitrario y criminal el acto de incorporación a la Monarquía Portuguesa” (resuelto por el Congreso de julio de 1821). Establecía que decía: “Que se declara nulo, arbitrario y criminal el acta de incorporación a la monarquía portuguesa, sancionada por el congreso de 1821, compuesto en su mayor parte de empleados civiles a sueldo de Su Majestad Fidelísima”.

“Que declara nulas y de ningún valor las actas de incorporación de los pueblos de la campaña al Imperio del Brasil, mediante la arbitrariedad con que se han extendido por el mismo Barón de la Laguna”.

“Que declara que Esta Provincia Oriental del Uruguay no pertenece, ni debe, ni quiere pertenecer a otro Poder, Estado o Nación que la que componen las Provincias de la antigua unión del Río de la Plata, que ha sido y es una parte, habiendo tenido sus diputados en la Soberana Asamblea General Constituyente desde el año 1814, en que se sustrajo enteramente del dominio español  Fuente: 

http://www.lr21.com.uy/comunidad/182644-dos-fechas-patrias-y-una-polemica

http://www.argentina-rree.com/3/3-017.htm 

Artículo 3º de la declaración del Cabildo de Montevideo en sesión extraordinaria del 29 de octubre de 1823 enviada al Gobierno de Buenos Aires, en Pablo Blanco Acevedo, Centenario de la Independencia, p. 64, citado en J. Beverina, op. cit., p. 85″

https://web.archive.org/web/20010914004402/http://www.argentina-rree.com/3/3-018.htm

J. Beverina. Guerra contra el imperio del Brasil, Buenos Aires, 1927

Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 44

Septiembre de 1823

1 de septiembre

Llegada de Bolívar a Lima

El Congreso de la República lo nombró «suprema autoridad» y después le encargó la lucha contra el ejército realista. Simón Bolívar, asumió la presidencia del Perú y tomó el mando del Ejército Unido

La llegada de Simón Bolívar a Lima el 1 de septiembre de 1823 fue saludada por una proclama de Sucre hacia el Ejército Unido:

Soldados: el hijo de la victoria ha pisado el Perú. El ilustre Bolívar llegó a las playas de Lima, i a su sombra desaparecen los peligros de la Patria.

Soldados: entregando el mando del ejército unido al Libertador de Colombia, mi corazón siente el placer inmenso de consideraros triunfantes bajo el jenio destinado por la América para humillar el orgullo español.
Peruanos: vuestra independencia está asegurada: los votos de los Incas quedarán cumplidos; la tierra del Sol será libre.
Chilenos: vosotros fuisteis los primeros en tremolar los estandartes americanos sobre las costas del Perú: llevadlos con nuevos laureles hasta el trono de Atahualpa.
Arjentinos: desde las márjenes de la Plata hasta el Ecuador, vuestras armas vencedoras se emplearon siempre en favor de vuestros hermanos: completad los servicios que os exige un pueblo amigo, para que el nuevo mundo os agradezca los bienes de la paz.
Colombianos: Bolívar os dio Patria i os condujo siempre a la gloria: él os invita a nuevos combates por la libertad; seguid sus pasos; un dia de Boyacá os volverá a Colombia.

En una carta al Almirante Martin George Guisse, fechada el 28 de abril de 1824,26​ Bolívar describió el Ejército Unido formado: «para hoy de 7.000 colombianos y 3.000 peruanos, está acantonado en la sierra, desde Huaraz hasta Cajabamba, ocupando con cuerpos de observación hasta Huánuco. Las partidas de guerrillas de peruanos se extiende hasta Lurín y Aznapuquio en las inmediaciones de Lima.»

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Ej%C3%A9rcito_Unido_Libertador_del_Per%C3%BA

https://elmontonero.pe/columnas/simon-bolivar-a-200-anos-de-su-llegada-al-peru

11 de septiembre

Sublevación de Montevideo (Septiembre de 1823 a noviembre de 1824)

Este día Da Costa (Contrario ala independencia del Imperio del Brasil  de Portugal) se posesionó de Montevideo, obligando a Lecor a escapara a San José.

14 de septiembre

Batalla de Jódar

En Jódar Jaén, Rafael de Riego es derrotado en la Batalla de Jódar contra las tropas francesas de los Cien Mil Hijos de San Luis, comandadas por el coronel D’Argout, y las tropas constitucionalistas. Como consecuencia de ella su comandante el general Rafael de Riego, que tres años antes había liderado el levantamiento de Las Cabezas de San Juan, obligando al rey Fernando VII a jurar nuevamente la Constitución de 1812, sería derrotado y vejado. Fue el final del llamado “Trienio Liberal” donde el país se regía por la Constitución de Cádiz de 1812, y donde, por ejemplo los ayuntamientos, pudieron elegir libremente sus cargos, sin contar con los señores jurisdiccionales. 

Fuentes:

15 de septiembre

Brasil rechaza la gestión argentina por la recuperación de la provincia oriental a su soberanía efectiva

El enviado del presidente argentino Bernardino Rivadavia, Valentín Gómez, entregó en Río de Janeiro un memorándum en donde se sostenía que en ningún momento la Provincia Oriental había dejado de pertenecer al territorio de las Provincias Unidas del Río de la Plata. «No obstante, la política conciliadora del ministro Rivadavia frente al Imperio cayó en saco roto. A la ocupación de Montevideo por parte de las fuerzas brasileñas comandadas por el general Lecor, se sumó el fracaso de la misión. El memorándum entregado por Gómez a las autoridades del Imperio fue rechazado categóricamente después de cinco meses de espera. Las palabras del canciller imperial fueron:

La incorporación de la Provincia Cisplatina al Imperio es un acto de la libre voluntad de todos sus habitantes, y el Brasil, por los sacrificios que ha hecho, está resuelto a defender aquel territorio, no admitiendo que se consulte nuevamente la opinión respecto a la incorporación de aquel Estado a las Provincias Unidas. (…) el Gobierno de S.M.I. (…) no puede entrar con el de Buenos Aires en negociaciones que tengan por base fundamental la cesión del Estado Cisplatino, cuyos habitantes no debe abandonar (Respuesta del ministro de relaciones exteriores del Imperio de Brasil, en J. Beverina, Guerra contra el imperio del Brasil, pp. 90-91).» 

Fuentes:

https://es.wikipedia.org/wiki/Provincia_Cisplatina

Historia de las Relaciones Exteriores de Argentina

J. Beverina. Guerra contra el imperio del Brasil, Buenos Aires, 1927

Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 43

Agosto 1823

4 de Agosto

Reunión de los gobernadores de Entre Ríos y de Santa Fe, declarando su propósito de apoyar la causa oriental y al mismo tiempo invitar al de Corrientes y al de Buenos Aires a una empresa en común. Se firma un convenio entre los gobernadores de Santa Fe y Entre Ríos para apoyar a los orientales en su intento de liberarse del poder brasileño.

La respuesta de Lecor a Mansilla fue cortante. El 16 de Junio el Barón no le reconocía autoridad al gobernador para formular la reclamación y le recordaba que dicha provincia estaba incorporada “a la Confederación del imperio” y que, en todo caso, debía dirigirse al emperador del Brasil.

El Acercamiento de Santa Fe y Entre Ríos facilitaba aparentemente los propósitos de la comisión oriental y el 4 de agosto de 1823 se firmaron tratados en Paraná en los que la provincia de Entre Ríos se comprometía a participar en la campaña.

Pero era evidente que estas actitudes de Mansilla no se avenían con sus compromisos contraídos con la provincia de Buenos Aires ni con la misión García de Cossio. Y el propio Mansilla lo confiesa en sus Memorias, expresando que nunca pensó cumplir los tratados, encargándose él mismo de introducir cláusulas difíciles de llevar a efecto. De esta manera, Mansilla quedaba en paz con la diputación oriental y con Santa Fe, seguía las orientaciones porteñas y no se comprometía con el gobierno de Lecor, con el cual estaba obligado por el tratado de San José de diciembre de 1822.

Por otra parte, por entonces actuaba cerca de Mansilla, como hombre de consejo y confianza, el agente del Brasil Juan Florencio Perea. En las actas de la Comisión Imperial de Canelones, la que corresponde al 6 de septiembre, se consigna la aprobación de los detalles de un plan de Perea con el fin de trastornar las maniobras hostiles de Santa Fe y Entre Ríos y posibilitar la incorporación al imperio de la segunda, más Corrientes y Misiones. Incluso en carta que Perea envía a Herrera le expresa, entre otras cosas, haber logrado dominar a Mansilla.

Es difícil el alcance de lo de “dominar a Mansilla”, pero es sugestivo que ante la protesta de Lecor por el tratado, publicado en Amigos del País, de Montevideo, el gobernador entrerriano le explicara al barón, el 24 de agosto, que el convenio firmado (4 de agosto) era una consecuencia de la reunión celebrada en febrero de 1822. Añadía que los gobiernos de la Liga no podían comprometerse a la guerra sin que tres al menos opinaran en su favor y que Entre Ríos había adherido junto con Santa Fe por razones “que no es este lugar expresar”, subrayando que todavía faltaba la opinión de los otros dos gobiernos (Corrientes y Buenos Aires) y, conocida la posición de Rivadavia, daba a entender lo improbable que se llegara a la guerra.

No obstante las dificultades planteadas por Mansilla, el Cabildo persistió en sus esfuerzos y, tratando de lograr la cooperación de Buenos Aires y Entre Ríos, intentó sustituir a Lavalleja por Rondeau en el mando del ejército oriental de invasión. Pero el gobierno porteño no autorizó a Rondeau para ocupar el cargo; por su parte, Luis Eduardo Pérez, diputado todavía en Santa Fe, se opuso enérgicamente al paso que se quería dar porque la gente “espera a Lavalleja; éste tiene muchísima más opinión que el otro, no solo en los suyos sino hasta en los enemigos”.

Los últimos trabajos de los comisionados al litoral. Entre los que ahora actuaba Atanasio Lapido, fueron ineficaces por los obstáculos que porteños e imperiales opusieron al éxito de su empresa. Todo ello cuando en Montevideo se anunciaba un acontecimiento de extrema gravedad: el retiro de las tropas de Alvaro da Costa. 

En: Narancio, o.c.

8 de Agosto

Desde Santa Fe los delegados orientales Pérez y de Acha hacen saber al Cabildo su opinión negativa sobre la designación de Rondeau, sustituyendo a Lavalleja.

No me parece acertado que venga el General Rondeau a mandar; es indudable que causará un disgusto general en el pago. La gente consentida y espera a Lavalleja; éste tiene muchísima más opinión que el otro, no sólo en los suyos sino hasta en los enemigos, También puedo decir que los Jefes auxiliares están contentos y acordes con él, lo que con el General Rondeau, habría mil dificultades… Yo, vista la mala impresión que esta noticia ha causado, hago entender que no es cierta, y que aun cuando lo sea, que no tendrá efecto. V.E. mire con mucho pulso este asunto y contésteme sin pérdida de tiempo lo que determine.(Luis E. Pérez).

Fuente:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3 

16 de Agosto

Se firma un Tratado de Alianza entre el gobierno de Entre Ríos y el Cabildo Representativo de Montevideo para el auxilio a los movimientos independentistas

110. Art. 1o.: El Gobierno de Entre Ríos facilitará por lo pronto 300 hombres de caballería, a situarlos en la costa del Uruguay, a donde dirigirá el de Santa Fe igual o mayor fuerza dentro de 15 días, para de allí determinar el pasaje con los mejores conocimientos que se adquieran al fin de asegurar la empresa a que se dirigen cuyas medidas serán tomadas de acuerdo por ambos gobiernos, o por el que lleve la acción

de mandar en Jefe.

“Art. 2o.: Los gobiernos de Santa Fe y Entre Ríos invitarán a los de Buenos Aires y Corrientes para que se presten a cooperar en la empresa por la vía de hecho con los que puedan desprenderse en conformidad al Art. 2o. del tratado reservado celebrado con el Congreso cuadrilátero y al 2o. del público en el mismo”.

“Art. 3o.: El Gobierno de Montevideo proporcionará todos los recursos que precise el de Entre Ríos para hacer obrar en auxilio de aquel territorio, la fuerza que mueva a este objeto.

“Art. 5o.: Emprendidas las operaciones militares que se derivarán de este convenio, las partes contratantes solemnizan que por ningún pretexto se dará una parte, por pequeña que sea, a los caudillos y demás hombres perjudiciales que el Gobierno de Entre Ríos ha expulsado de su seno, a no ser que hayan merecido indulto; antes bien, se le entregarán en caso de ser aprehendidos, bajo la responsabilidad de conservarles las vidas.

“Art. 7o.: El Gobierno de Montevideo dará conocimiento a los jefes de la liga, o sea a los que se unen para su libertad, de la fuerza con que cuenta para el sostén de la guerra, en el término de veinte días.

“Art. 8o.: Los artículos de esta convención serán ratificados por los gobiernos que la promueven en el término de tres días.

“Una, es la idea madre que dirige el esfuerzo de todos. El Cabildo Representante de Montevideo la expresa categóricamente: “la Independencia Absoluta”; pero ese postulado, que infelizmente no llegó a concretarse en una Declaración explícita, provoca en el sentimiento de los hombres dirigentes dos tendencias, que si coinciden ambas en su pensamiento central de la Independencia Nacional, aparecen ligadas: una, a un pacto de unión con el Brasil, previo el reconocimiento expreso de determinadas condiciones para hacer efectiva la unidad; y la otra, en identidad de circunstancias con las entonces Provincias del Río de la Plata (Buenos Aires, Entre Ríos, Corrientes y Santa Fe), vinculadas entre sí por el Pacto llamado del Cuadrilátero (25 de enero de 1822), que al celebrar la paz y amistad recíproca de las provincias reconocía la libertad y la Independencia de cada una. 1

Pero antes de proseguir el desarrollo de los sucesos que tuvieron por término el fracaso más absoluto de las esperanzas de Obes y Santiago Vázquez, veamos todavía hasta dónde llegó la convicción de los hombres de Montevideo, de llevar a solución la empresa por la Independencia proyectada en 1823. A fines del mes de julio, las comunicaciones todas de Santa Fe, daban como un hecho la proximidad de la invasión al territorio Oriental, y Estanislao López insinuaba la conveniencia de nombrar como generalisimo a Rondeau, propuesta que el Cabildo no aceptaba, manteniendo el nombramiento que hiciera en favor del teniente coronel Juan Antonio Lavalleja, como jefe de la expedición. En agosto, recibiánse todavía los Tratados celebrados por la Comisión Oriental y las Provincias de Santa Fe y Entre Ríos, esta última adherida por la influencia que ejerciera López en el ánimo de su gobernador Lucio Mansilla. Dichos convenios, que eran dos, uno público y otro secreto, debidamente firmados y ratificados por las partes, se remitieron para la aprobación de Montevideo, cuya autoridad capitular llenó ese requisito. Por el primero de los Tratados (celebrado éste tan sólo entre Montevideo y Santa Fe) en ocho artículos separados, formulábase un pacto ofensivo y defensivo, en la lucha a emprenderse contra el Brasil, y la especificación de que todos los recursos, municiones, armas y pago de soldados, serían de cuenta de Montevideo. En cuanto al segundo, es decir, el secreto, el cual hallábase firmado también por el representante de Entre Ríos, referíase a los contingentes para la formación de un ejército en la línea del Uruguay, comprometiéndose ambas provincias a formar, cada una, un cuerpo de trescientos hombres; a la solicitud que se haría a Buenos Aires para su participación en la guerra de acuerdo con el artículo 2° del Tratado reservado del Cuadrilátero; y, finalmente, a la declaración nuevamente expresada, que todos los gastos que necesitara realizar Entre Ríos, estarían a cargo de Montevideo. 2

Los Tratados no tuvieron cumplimiento, pero, aceptados de buena fe por Montevideo y promovidos a instancias de su Cabildo, demuestran en su celebración, el carácter de independencia de que aquella autoridad se creía investida, y, al mismo tiempo, el intenso deseo de llevar a cabo la campaña libertadora, llegando a ese fin, a costa de grandes sacrificios materiales. 3 El gobierno capitular realizó todavía otra clase de esfuerzos en pro de su alta idealidad de independencia”.

—- 

1. Artículo I del Tratado de Cuadrilatero de 25 de enero de 1822. Colección Varela, Imp. Montevideo, 1848, pág. 22.

2. El Tratado público se encuentra inserto en la obra de Ramón Lasaga: “Historia de López”. El Tratado secreto lo tomamos de su texto original en el Archivo General Administrativo.

3. Según Adolfo Saldías (“Historia de la Confederación Argentina”), Estanislao López suscribió los tratados obligado por las penurias económicas de la provincia y con la idea de resarcirse ante los generosos ofrecimientos pecuniarios de la Comisión Oriental. (Tomo 1, pág. 177). En cuanto a Lucio Mansilla, su acción, díjose entonces, en 1823, fue neutralizada mediante una suma de dinero facilitada por Lecor. (Memoria de Lorenzo J. Pérez, “Revista Histórica” de Montevideo, tomo III, pág. 249.) En: Blanco Acevedo, o.c.

Fuentes:

https://www.entrerios.gov.ar/archivogeneral/userfiles/files/Fondo%20Gobierno/SERIE_III%20(3)%20(4).pdf

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3 

25 de Agosto

Batalla de Zepita, de resultado indeciso

La batalla de Zepita también conocida como batalla de Chua Chua fue un hecho de armas de la guerra de independencia peruana, ocurrido el 25 de agosto de 1823 en la llanura ubicada al norte de Zepita a orillas del lago Titicaca, entre el ejército peruano al mando del general Andrés de Santa Cruz y el Ejército Real del Perú bajo las órdenes del general español Jerónimo Valdés. 

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_Zepita

31 de Agosto

Batalla de Trocadero 

Fin del trienio liberal en España

Fue un encuentro bélico que puso fin al Trienio Liberal español (1820-1823) y restauró al monarca absolutista Fernando VII, dando inicio a la «Década Ominosa» (1823-1833). La intervención de tropas francesas llamadas los Cien Mil hijos de San Luis hizo acabar el enfrentamiento a favor del bando tradicionalista que se enfrentaba a la revolución constitucional. Renunciando a su compromiso de amnistía con los revolucionarios, el rey ordenó represalias despiadadas mientras estuvieron las tropas francesas. En los siguientes años fueron ejecutadas 30.000 personas. El rey además abolió nuevamente la Constitución de 1812, dando paso a una década absolutista llamada década ominosa por sus opositores de entonces y la mayor parte de los historiadores. 

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_Trocadero

Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 42

Julio 2023

Julio es el mes de las independencias allá por 1823, en particular en Centro América donde la aspiración de México a englobar a toda la región se ve menguada por el inicio de las sublevaciones internas. Por el barrio sur, los portugueses emprenden la retirada dejando al nuevo imperio el total dominio de los territorios. Por último me parece relevante mencionar que Venezuela consolida su independencia con la batalla naval de Maracaibo. 

1 de julio

Nicaragua y Guatemala se separan de México, no están de acuerdo con la proclamación de Iturbide como emperador ni con el pago de alcabalas.

Fuentes:

https://www.memoriapoliticademexico.org/Efemerides/7/01071823.html

1 de julio
Independencia de la América Central
Una Convención Constituyente, convocada por el general Filisola en Guatemala, al conocer que el congreso mexicano ha dejado a la América Central en libertad de decidir su futuro, presidida por el sacerdote salvadoreño José Matías Delgado, declara la independencia absoluta de la antigua Capitanía General de Guatemala, con jurisdicción sobre toda la región centroamericana.

Fuentes:

https://es.wikipedia.org/wiki/Independencia_de_Centroam%C3%A9rica

2 de julio de 1823
Retirada portuguesa de Brasil
Las tropas portuguesas se ven obligadas a evacuar Brasil, luego de sufrir sucesivas derrotas militares frente a los batallones formados por criollos y las tropas imperiales en Piraja (8 noviembre de 1822), Itaparica (7 de enero de 1823), Conceicao e Itapao (febrero y marzo de 1823) y en la batalla naval del 4 de marzo de 1823. No obstante, el último reducto portugués capitula el 12 de agosto de 1824.

Fuentes:

https://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_de_Independencia_de_Brasil


21 de julio de 1823
Fin de la esclavitud en Chile
El gobierno chileno, encabezado por Freire, decreta la abolición de la esclavitud.

Fuente:

https://www.archivonacional.gob.cl/la-abolicion-de-la-esclavitud-en-chile

24 de julio de 1823
Batalla Naval del Lago de Maracaibo en Venezuela.
José Prudencio Padilla derrota a la armada realista de Ángel Laborde y con ello se consolida la independencia de Venezuela. Será el último enfrentamiento importante con las fuerzas españolas en territorio venezolano.

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Combate_naval_del_Lago_de_Maracaibo

Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 40

Mayo de 1823

8 de Mayo

Combate de “La Perfidia”

El coronel RODRÍGUEZ salió de Montes, en la provincia de Buenos Aires, en procura de un grupo de 800 indígenas “aucas” que se iban a incorporar a sus fuerzas para auxiliar a sus tropas en posibles entreveros con los ranqueles y también para indicarles en el terreno la ubicación de aguadas y pastizales. El 8 de mayo, llegando a una laguna conocida como “La Perfidia”, los “aucas” que se le habían unido sólo esperando el momento oportuno para volverse contra él, lo atacan tratando de frustrar su intento de seguir la marcha para dominar las tierras que consideraban propias. Los indígenas son rechazados, pero a costa de grandes pérdidas, lo que obliga al coronel Rodríguez a emprender el regreso hacia Montes. (Campaña al Desierto).

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Campa%C3%B1as_de_Mart%C3%ADn_Rodr%C3%ADguez_contra_los_ind%C3%ADgenas

https://www.todo-argentina.net/historia-argentina/unitarios-y-federales/martin-rodriguez/campana-indios.php?idpagina=524

17 de mayo

Batalla de Casavalle

Se produce la extraña situación de un Batalla de Casavalle entre los portugueses, al mando del futuro creador del Partido Nacional, y los brasileños bajo órdenes del futuro creador del Partido Colorado. Las tropas al mando del Gral. Manuel Oribe vencen a las fuerzas imperiales de Lecor, comandadas por Fructuoso Rivera.

Fuente: 

https://www.elobservador.com.uy/nota/reflejo-de-una-edad-convulsionada–201461318210

https://es.wikipedia.org/wiki/Casavalle

30 de mayo

Nuevas tentativas de los patriotas orientales que piden ayuda militar a gobernadores amigos de Santa Fe y de Entre Ríos

Nuevas tentativas de los patriotas que piden ayuda militar a gobernadores amigos de Santa Fe y de Entre Ríos. El gobernador Mansilla resuelve enviar una nota al Brg. Lecor en nombre del gobierno de Buenos Aires, de Entre Ríos, Corrientes (Santa Fe había manifestado su adhesión) pidiendo la “entera libertad de la Prov. de Montevideo o Banda Oriental”, así como que cesaran las persecuciones a los revolucionarios y la “desocupación del territorio”.

Santa Fe y Entre Ríos resuelven ayudar a Montevideo.

“Redoblaron entonces los patriotas de Montevideo sus trabajos ante los gobiernos de Entre Ríos y Santa Fe. El gobernador de Entre Ríos, don Lucio Mansilla, fiel a la vieja tradición de las intimaciones y protestas contra la conquista portuguesa, dirigió un oficio al general Lecor el 30 de mayo de 1823 (De-María, “Compendio de la Historia”):

“Los Gobiernos de Buenos Aires, Corrientes y Entre Ríos, decía, han llegado por fin a concluir que su decoro, su honor y su interés, el bien y el interés de la nación entera, exigen que reclamen de la Corte o Gobierno del Brasil la entera desocupación y libertad de la Provincia de Montevideo, en desagravio del derecho que tiene a dicho territorio la nación, como parte integrante del suyo, autorizando al mismo

tiempo al Gobierno de Entre Ríos para que en nombre de los preindicados intime al Excmo. e Ilmo. Señor Barón de la Laguna suspenda toda hostilidad directa o indirecta contra los naturales de ese país que defienden su independencia, mientras su Gobierno pasa con su resolución en esta materia al diputado que para el objeto se ha nombrado con la representación de dichos Gobiernos y que a esta fecha ya habrá partido para su destino”.

En: Eduardo Acevedo, o.c.

Fuente:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3 

Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 39

Abril de 1823

4 de abril

Siguiendo con los planes de la Provincia, serán Manuel Durán, Pedro Amigo y Leonardo Olivera los encargados del levantamiento, en espera de la llegada de Lavalleja.

4 de abril

Fundación del Fuerte Independencia, origen de la actual ciudad de Tandil de la Provincia de Buenos Aires en la República Argentina

El Fuerte Independencia fue fundado por el gobernador Martín Rodríguez, para servir de bastión contra los malones indios. Se hallaba ubicado en el lugar en donde hoy está la parroquia del Santísimo Sacramento, frente a la plaza principal de la ciudad de Tandil. 

https://es.wikipedia.org/wiki/Fuerte_Independencia

7 de abril

Los Cien Mil Hijos de San Luis entran en el país, restableciendo el gobierno absolutista de Fernando VII. https://es.wikipedia.org/wiki/Restauraci%C3%B3n_absolutista_en_Espa%C3%B1a

https://es.wikipedia.org/wiki/Cien_Mil_Hijos_de_San_Luis

7 de abril

Congreso de Verona (Europa)

El Congreso de Verona, celebrado el 22 de noviembre de 1822 en Verona, la Cuádruple Alianza, así como las potencias que formaban parte de la Santa Alianza, Rusia, Austria y Prusia deciden la reinstauración del absolutismo en España reclamada por el mismo rey, tras el pronunciamiento llevado a cabo por Rafael del Riego que consiguió cercar políticamente a Fernando VII, jurando la Constitución de Cádiz e iniciando el Trienio Liberal que tuvo un gran efecto en el resto de los países europeos.

El 7 de abril de 1823 se produce la invasión de España por parte de los Cien Mil Hijos de San Luis, penetrando con escasa resistencia hasta Cádiz. Comienza así la Década Absolutista, conocida como la Década Ominosa por los liberales. «

11 de abril

Cabildo abierto en Canelones donde estaba acampando Lecor. Discurso de Lucas José Obes donde afirma la amistad con el Emperador de Brasil. 

Pero si la Independencia Nacional era la palabra de orden para el Cabildo de Montevideo y la finalidad ansiada en lo íntimo de sus acciones, la misma idealidad, aun desde un punto diametralmente opuesto, perseguían los orientales que permanecieran adictos al Brasil, en la seguridad dada de que el nuevo Emperador no reconocería los actos de Juan VI y la ocupación del territorio Oriental. A la constitución del

Cabildo erigiéndose en corporación suprema, Lecor contestaría declarando esa autoridad intrusa y delincuente, y como la efervescencia de los ánimos amenazase propagarse ya en todo el territorio, García de Zúñiga se dirigió a los comandantes militares de los departamentos, significándoles, que si ellos “lo que deseaban era la independencia del país, esa aspiración la alcanzarían sin recurrir a medios violentos,

como acto espontáneo del Brasil”.55

En tanto, definida la situación de Montevideo, y mientras los cuerpos de la guarnición libraban ya combates 56 con el ejército brasileño, el Cabildo de Representantes, ante la inminencia de la invasión de López,57 exhortaba a los habitantes de la campaña a reunirse a aquellas banderas que representaban “la libertad y la salvación de la Patria”. Lecor mismo, atemorizado ante el giro de los sucesos, daba sus órdenes para impedir las reuniones de ciudadanos y contestaba a las proclamas de Montevideo asegurando que el interés del Brasil era el del Uruguay, y que si los orientales hacían causa común con los brasileños en su lucha con Portugal, el Imperio “aseguraría la independencia y libertad del territorio nacional, dejando únicamente al tiempo que confirmase esa verdad”.58

A este mismo tenor se sujetaban las declaraciones de los Cabildos departamentales convocados para decidirse entre la Independencia absoluta de inmediato, proclamada en Montevideo y la adhesión provisoria al Brasil, como paso previo para obtener el reconocimiento de la misma independencia. El acta de Canelones de 11 de abril, sobre cuyo texto hicieronse las del resto del país, ofrece suficientes elementos de juicio, a fin de penetrar el pensamiento que guiaba a su vecindario. Con esa fecha, citados a la Sala Capitular de Guadalupe, el pueblo y autoridades administrativas y judiciales, a pedimento del Síndico General del Estado, luego de manifestar éste que su deseo era que la Asamblea se pronunciase sobre los principios proclamados en Montevideo, (la independencia absoluta) o el pacto de confederación al Brasil, bajo condiciones que expresamente se determinarían, el voto de los presentes, dice el acta, se decidió por la incorporación al Imperio en términos de la declaración del 20 de octubre de 1822, pero previas la afirmaciones del Síndico, de que esas bases señaladas habían sido aceptadas por el Brasil. El documento que mencionamos refiere, a continuación, que el Síndico General “satisfizo a los señores preopinantes asegurando que una parte de las peticiones expuestas, estaban acordadas”,

pero, para mayor ilustración, debería hacerse comparecer al doctor Lucas J. Obes, quien sería la persona indicada para llevar a Río de Janeiro la impresión exacta del sentir de los habitantes de la campaña. El doctor Obes concurrió a la Asamblea, y de su discurso incorporado al texto del documento,  reproduciremos algunos de sus conceptos fundamentales, para desentrañar exactamente las ideas predominantes.

Comenzaba el doctor Obes por vindicarse ante la acusación hecha por la prensa de Montevideo, que le tildara de antipatriota, mencionando, en su descargo, que por patriota los godos le habían perseguido y expatriado; que no había lucrado jamás con la revolución; que a su paso para Lisboa en 1822 se detuvo en Río de Janeiro, donde permaneció un año; que allí había dicho que los pueblos orientales se unirían a un gobierno que les asegurase “todo aquello a que se creían con derecho y por lo que habían sufrido una guerra sangrienta de diez años”. “Esto era en febrero de 1822”, – decía Obes- “creo que entonces, nadie pensase de otra manera, pero ahora, (1823), hay un partido en Montevideo que predica la guerra. La cuestión es, pues, diferente porque se dice en Montevideo, que los pueblos quieren la independencia absoluta y yo lo creo, como creo que cualquiera de nosotros más querría tener cien mil pesos, que cien reis, o un rodeo de veinte mil vacas, que uno de cien. Pero, ¿esto es posible? ¿Podemos constituir un Estado que no dependa de nadie y que pueda sostenerse contra las pretensiones del Brasil? Los anarquistas 59 están por la afirmativa, y dicen más, que seremos los pueblos más felices de la tierra sólo con resolvernos a pelear contra el Imperio; pero, amigos, bueno es discutir en asuntos de tanto interés. Se puede hacerla guerra al Brasil y no tenemos ejército; se puede, y no tenemos un tesoro; se puede, y para conseguir que Santa Fe nos permita reclutar en sus desiertos, hemos gastado seis meses y muchos pesos en diputaciones. Lo que se puede, -agregaba todavía,- lo sé yo también como el más avisado de los que me oyen y el más valiente de los que me censuran. Nosotros podemos meter el país a barato, encender la guerra, poner en alarma a todos los habitantes de la campaña, molestar al enemigo, ocasionarle pérdida, matarle hombres, convertir la provincia en un teatro de sangre, pero lo que no podemos es triunfar, ni cimentar un gobierno, por el mal incurable de la ambición y el anarquismo de que padecen todas las provincias sin excluir a Lima y Caracas, como lo publican las gacetas de Buenos Aires…” y el doctor Lucas Obes, terminaba su alocución manifestando que si nada aconsejaba, pedía simplemente que cada uno expresase su opinión para ser portavoz ante el Imperio y promover allí “la felicidad del Estado, su Independencia y sus Libertades”.

Así lo resolverían el Cabildo y el pueblo de Canelones, y, aprobadas y ratificadas posteriormente esas declaraciones en la misma forma por Maldonado, el doctor Lucas J. Obes se embarcaría un tiempo después para Río de Janeiro.”

55. Oficio de García de Zúñiga al comandante de las milicias de Soriano, J. Puentes. (Archivo de Soriano).

56. “El Argos”, de Buenos Aires, de 23 de marzo de 1823. (Colección del autor).

57. Proclama de López, de 17 de marzo, anunciando su próximo pasaje del Uruguay (original suscrito por López, en el Archivo General Administrativo). Publicado en hoja suelta, Imprenta Alvarez, Buenos Aires, 1823.

58. Copiador de oficios del Gobierno Independiente, 1823. Documentos Cabildo de Montevideo. (Archivo General Administrativo) Isidoro De María: “Historia de la República Oriental del Uruguay”, tomo IV, página 250.

59. Este vocablo empleado por Lucas J. Obes, es el mismo que usaba la prensa de Canelones que llamara a los hombres de Montevideo: facciosos, anarquistas y alvearistas.

En: Blanco Acevedo, o.c.

Fuente:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3 

17  de abril

Asamblea Constituyente del Imperio del Brasil

Con representantes de la provincia Cisplatina elegidos por influencia de Lecor. Esto significaba el reconocimiento formal de la incorporación de la Cisplatina al Brasil, y dió pretexto a la sublevación.

El 3 de marzo de 1823, la Asamblea General Constituyente y Legislativa del Imperio de Brasil inició su legislatura para realizar la primera constitución del país. Ese mismo día, Pedro I dijo un discurso a los diputados allí reunidos, dejando claro por qué había afirmado durante su coronación al final del año anterior que la constitución debía ser digna de Brasil y de él.

https://es.wikipedia.org/wiki/Primer_Imperio_de_Brasil

21 de abril

En su intento, Amigo junto con otros patriotas cae prisionero cerca del arroyo Malo (hoy Tacuarembó). Es enviado a la cárcel de Canelones y sentenciado a muerte.

29 de abril

Mientras por un lado se amnistía a los conjurados, por otro, se premia a Rivera por su lealtad, según solicitud de García de Zúñiga.

30 de abril

Consecuencia de esta acción y por las personas supuestamente implicadas, Mansilla le comunica al Cabildo montevideano su negativa a cualquier tipo de auxilio.

Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 38

Marzo de 1823

3  de Marzo

Asamblea Constituyente del Brasil (1823-1824)

El 3 de marzo de 1823, la Asamblea General Constituyente y Legislativa del Imperio de Brasil inició su legislatura para realizar la primera constitución del país. Ese mismo día, Pedro I dijo un discurso a los diputados allí reunidos, dejando claro por qué había afirmado durante su coronación al final del año anterior que la constitución debía ser digna de Brasil y de él.2​)

Pedro I recordó a los diputados en su discurso que la constitución debía impedir eventuales abusos no solo por parte del monarca sino también de la clase política y de la población. Para ello, se debería evitar implantar leyes que en la práctica no serían respetadas. La Asamblea, en un primer momento, se apresuró a aceptar el pedido del emperador,3​ pero a algunos diputados les incomodó el discurso de Pedro I. Uno de ellos, el diputado por Pernambuco, Andrade de Lima, manifestó claramente su descontento alegando que la frase del monarca era bastante ambigua.2

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Primer_Imperio_de_Brasil

6 de marzo

Segunda campaña contra los indios en Buenos Aires

Segunda campaña: partió el 6 de marzo de 1823 desde Buenos Aires con 2.500 soldados con la intención de avanzar la frontera de la provincia de Buenos Aires hacia el sur y el oeste. No se lograron resultados positivos pero se fundó el Fuerte Independencia el 4 de abril de 1823, origen de la actual ciudad de Tandil. 

https://es.wikipedia.org/wiki/Campa%C3%B1as_previas_a_la_Conquista_del_Desierto

13 de marzo

Tratado de Alianza Ofensiva y Defensiva entre Santa Fe y el Cabildo de Montevideo

El 5 de marzo llega a Santa Fe la comisión-delegada del Cabildo de Montevideo que integraban los orientales Domingo Cullen, Luis E. Pérez, Román de Acha y Juan Vázquez Feijóo, acompañados de Juan Antonio Lavalleja (que vivía en Buenos Aires), Juan Francisco Segui (ministro de Estanislao López). Venía con Seguí y los comisionados uruguayos, el coronel don Juan Manuel de Rosas. La circunstancia era oportuna para recibir del pueblo de Santa Fe las naturales demostraciones de gratitud. 

De las gestiones que los patriotas llevan a cabo en el litoral argentino, se firman tres tratados por los que Santa Fe compromete su ayuda a los orientales. Los delegados del Cabildo montevideano que van a Santa Fe, logran el apoyo del gobernador Estanislao López, que suscribe un tratado de alianza ofensivo-defensiva.  Se firma una alianza de solidaridad con el movimiento revolucionario oriental entre el gobernador de Santa Fe y los representantes del Cabildo.

La misión al Litoral

“Muy distinta fue, en cambio, la suerte corrida por la comisión al Litoral (Cullen, Pérez y De Acha). De la época del destierro de Lavalleja se había tomado contacto con Entre Ríos y Santa Fe. Lavalleja había conversado con Mansilla, después lo había hecho Zufriategui y Cullen también había estado en Santa Fe. Preparado entonces de antemano el terreno, la segunda comisión oriental partió con destino a Buenos Aires y desde allí, finalizando febrero, emprendieron el viaje para la capital santafesina acompañados por el secretario de gobierno de la provincia de Santa Fe, Juan Francisco Seguí y por Juan Manuel de Rosas3. Los aguardaba el gobernador Estanislao López, siendo objeto de un recibimiento apoteósico, según da cuenta el secretario de la diputación, Juan Vázquez Feijóo, en una carta de contornos pintorescos donde también detalla la comida ofrecida por el Cabildo, así como la velada con baile, en el cual se contó con “el concurso que no podrá esperarse jamás tan dignamente como merece, el del Bello Sexo”.

Pero no todas fueron obligaciones sociales para los representantes orientales. Las conversaciones, sobre los fines de la misión, avanzaron rápidamente y su resultado fue la firma, el 13 de marzo de 1823, de tres tratados en los que Santa Fe se comprometía a auxiliar a los orientales, a cambio de ciertas ventajas de las que no estuvo ausente el interés personal de López y de Seguí. 

Con estos tratados se inicia una serie que se cierra en agosto del mismo año (tratado entre el Comisionado del Cabildo y Entre Ríos del 4 de agosto de 1823), pero en la que se aprecia la continuación de los pactos interprovinciales iniciados por Artigas. En el fondo, estos acuerdos de Santa Fe, encarados como manifestaciones de un proceso, no hacen otra cosa que continuar el de Ábalos del 23 de abril de 1820 entre la Provincia Oriental, Corrientes y Misiones.

Sin embargo, bastaba echar una mirada sobre el mapa para advertir que todos estos esfuerzos eran inútiles si no se contaba con la cooperación de Entre Ríos, por donde necesariamente debía pasar la expedición libertadora, por lo cual interesa saber cuál era la posición del gobernador Mansilla.

El Tratado firmado el 13 de marzo de 1823 entre el el gobierno de Santa Fe y representantes del Cabildo de Montevideo en una alianza militar para enfrentar la invasión que sufría la Provincia Oriental por parte del Imperio de Brasil. Ante el panorama de la independencia de Brasil y los problemas entre las tropas de la Provincia Cisplatina, los habitantes de Montevideo se dirigieron a los gobiernos de Buenos Aires y Santa Fe para pedir ayuda y enfrentar al enemigo, siendo los enviados el teniente coronel Tomás de Iriarte y Domingo Cullen. Otra delegación fue enviada ante Simón Bolívar en Perú, pero este no contesto, y el gobernador bonaerense Martín Rodríguez rechazó el pedido.​ No se les envió a las provincias de Corrientes y Entre Ríos ya que estaban ligados a Buenos Aires por el tratado del Cuadrilátero.​  

Cumpliendo con la parte pública del tratado, López dirigió a los gobiernos de provincia una circular el 21 de marzo de 1823 incitándolos a colaborar en la campaña. Bernardino Rivadavia, ministro del gobernador de Buenos Aires Martín Rodríguez, comenzó a alarmarse con las actitudes del gobernador santafesino. Puso todo tipo de excusas, advirtiendo incluso a las provincias sobre las posibles consecuencias de un enfrentamiento con un enemigo tan poderoso como los portugueses. Así escribía Rivadavia a Mansilla, gobernador de Entre Ríos:

Cualquier paso que se de (…) por una o por otra de las provincias en favor de aquella recuperación, puede comprometerles a todas en compromisos difíciles y esto sin haberse consultado con anterioridad la opinión de cada una lo que causaría una responsabilidad enorme (…) No obstante los esfuerzos de López, casi ninguna de las otras provincias se manifestó dispuesta a secundar la acción de Santa Fe en favor de los orientales. Mendoza y Entre Ríos fueron la excepción. La primera, aunque financieramente exhausta por los grandes sacrificios realizados en las campañas emancipadoras de Chile y Perú, ofreció los productos de su suelo, «»en obsequio de la libertad de nuestros hermanos orientales, que gimen en cadenas bajo el yugo portugués»». Por su parte, el gobierno de Entre Ríos, haciendo caso omiso del reciente tratado de Neutralidad, amistad y buena armonía firmado con el barón de la Laguna, aceptó seguir la actitud de apoyo a los orientales del gobierno de Santa Fe. Esta conducta del gobernador entrerriano Mansilla provocó en abril de 1823 una nota de agradecimiento del Cabildo de Montevideo. http://www.argentina-rree.com/3/3-020.htm  A su vez, el gobernador Mansilla, creyendo que podía convencer a Lecor de la legitimidad de los reclamos de los disidentes orientales, le dirigió una nota el 30 de mayo de 1823. En ella, Mansilla, a nombre también de los demás gobernadores, manifestaba la ilegalidad del acto de incorporación de la Provincia Cisplatina al Imperio del Brasil y la conveniencia de que las tropas de ocupación evacuasen aquel territorio, para evitar que se produjese un conflicto armado.

La respuesta de Lecor no se hizo esperar. El 16 de junio mostró a través de una carta su indignación por la conducta de Mansilla, quien con su actitud violaba el pacto firmado entre ambos. Asimismo Lecor señalaba claramente a Mansilla que no estaba dispuesto a ceder a los deseos de los orientales, advirtiendo que haría respetar los límites e integridad del Imperio.»

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Tratado_entre_Santa_Fe_y_el_Cabildo_de_Montevideo

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3 

Busaniche, José Luis, Rosas en la historia de Santa Fe (hasta la muerte de Estanislao López)

Estanislao López y el federalismo del  litoral  “N.° 3 Exposición de los obsequios hechos en Santa Fe, a los Sres, Diputados del Exmo. Cabildo representante de la Provincia de Montevideo”

13 de marzo

Fracasa en la Provincia Oriental un Levantamiento Patriota.

Fracasa en la Provincia Oriental un levantamiento de los patriotas Pedro Bonifacio Amigo, Manuel Durán y Leonardo Olivera, que contaba con el apoyo del Cabildo y que formaría parte de la invasión preparada por Lavalleja desde la Argentina. Estos terminan completamente derrotados, siendo Amigo apresado y fusilado en la plaza de Canelones.

Mientras se realizan reuniones entre el gobernador de Entre Ríos, Cnel. Mansilla con Bernardino Rivadavia, ministro del gobierno de Buenos Aires, en la Provincia litoraleña se generó un movimiento militar para derrocar a Mansilla.

17 de marzo

Batalla de Casavalle

La caballería de Manuel Oribe vencen a las fuerzas imperiales de Lecor comandadas por Rivera.

Oribe por esto recibe el grado de Tte. Cnel. por el Cabildo montevideano, pero no es acompañado de la firma de da Costa.

19 de marzo

Agustín I, abdica como emperador de México.

En México, Iturbide ante el Congreso abdica de su condición de Emperador. Los revolucionarios republicanos llegan a la capital e instalan el Gobierno Provisional que fundará los Estados Unidos de México.  

https://es.wikipedia.org/wiki/Agust%C3%ADn_de_Iturbide#Abdicaci%C3%B3n_2

21 de marzo

Lord Thomas Cochrane, un mercenario británico, llega a Río de Janeiro para organizar la fuerza naval brasileña.

El 13 de marzo de 1823 entró en la bahía el bergantín ··colonel Allen .. trayendo a Cochrane y cuatro oficiales que habían luchado con él. Las buenas noticias se esparcieron. Cochrane bajó a tierra a entrevistarse con José Bonifacio y el emperador. Aceptado por el gobierno del Brasil, Cochrane izó el 21 de marzo de 1823 su insignia en el «Pedro I. 

https://revistamarina.cl/revistas/1975/6/rfuenzalidab.pdf   https://www.histarmar.com.ar/AcademiaUruguayaMyFl/2010/LordCochrane.htm 

23 de marzo

Combate de Ranquilco

Una partida compuesta por 50 hombres al mando del teniente RODRÍGUEZ que saliendo desde el Fuerte San Carlos, debía dirigirse al sur luego de marchar 36 leguas por un terreno árido y salitroso que por falta de agua, se le hizo muy penoso, ataca en sus tolderías de Ranquilcó al cacique YAYPILAU tomándole numerosos prisioneros

25 de marzo

El patriota Pedro Amigo sale a la campaña con algunos orientales para tratar de levantar fuerzas que enfrenten a los brasileños.

28 de marzo

Combate de el Puesto

El caudillo Juan Facundo Quiroga (1788-1835) se enfrenta en un duelo de lanzas con el general Miguel Dávila. Lo mata, y se libra la batalla de El Puesto entre las dos fuerzas. Facundo QUIROGA derrota a DAVILA y se erige en el jefe indiscutido de esa provincia.

https://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_El_Puesto

Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 38

Febrero 1823

1 de febrero

Se firma el Plan de Casa Mata (México) que restaura las potestades de una soberana Asamblea General Representativa que proclama la República de México.

Luego de la Independencia de México, surgió una monarquía constitucional bajo el mando de Agustín de Iturbide. Este primer emperador duró en el poder del 21 de julio de 1821 al 19 de marzo de 1823.

El tratado de 1823 significó la restitución del Congreso Constituyente y el fortalecimiento de la soberanía nacional ante el absolutismo

El plan de Casamata fue proclamado el 1 de febrero de 1823​ por Antonio López de Santa Anna en un depósito de pólvora, llamado Casamata, ubicado a las afueras de la Ciudad de Veracruz, al que posteriormente se le unirían Vicente Guerrero, Nicolás Bravo y jefes del ejército imperial (incluso del propio ejército de Iturbide) como José Antonio de Echávarri, Luis Cortázar y Rábago y José María Lobato. Tenía la intención de reinstalar el congreso y declarar nulo el imperio y el desconocimiento de Iturbide como emperador

El camino hacia el tratado comenzó a inicios de diciembre de 1822, en Veracruz. El militar Antonio López de Santa Anna junto con un grupo de partidarios republicanos se pronunciaron en las calles del puerto en contra del emperador Iturbide. Hicieron un llamado a la reinstalación del Congreso Constituyente de 1822, el cual había sido disuelto por el emperador.

Respecto a las consecuencias del tratado para Iturbide, el AGN esclarece que con la restitución del Congreso, el imperio mexicano perdió al ejército. Las fuerzas imperiales eran el único sostén que validaba a Agustín de Iturbide, quien carecía de algún título de legitimación, necesario para sostener una monarquía y un rey.

Fuentes;

https://es.wikipedia.org/wiki/Plan_de_Casa_Mata

https://www.infobae.com/mexico/2023/02/01/la-historia-del-plan-de-casa-mata-y-su-relacion-con-maximiliano-de-habsburgo/

https://es.wikipedia.org/wiki/Revoluci%C3%B3n_del_Plan_de_Casa_Mata

Participantes: 

Agustín de Iturbide, Antonio López de Santa Anna, Vicente Guerrero, Nicolás Bravo,  José Antonio de Echávarri, Luis Cortázar y Rábago, José María Lobato.

4 de febrero

Los patriotas orientales sólo aceptan la decisión de que se reclamará diplomáticamente por la ocupación de la Prov. Cisplatina por el Brasil.

Fuente:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

7 de Febrero

En Perú con la caída de la Junta de Gobierno, asume la Presidencia José de la Riva Agüero (1783-1858). La pugna entre el Congreso y de la Riva Agüero es aguda y éste será depuesto y expulsado del Perú.

El Congreso instalado por San Martín el 20 de septiembre de 1822 asumió la suma del poder público y al día siguiente encargó el Poder Ejecutivo a un grupo de tres diputados, que se denominó la Suprema Junta Gubernativa, presidida por José de La Mar. Esta Junta se propuso atacar a los realistas concentrados en el centro y el sur peruano, organizando dos ejércitos, pero los desastres sufridos por el Ejército del Sur en Torata y Moquegua exacerbaron a la opinión pública que exigió la constitución de un gobierno unipersonal. 

José Mariano de la Riva-Agüero y Sánchez-Boquete (Lima, 3 de mayo de 1783Lima, 21 de mayo de 1858) fue un militar y político peruano. Figura prócer de la independencia hispanoamericana, fue presidente del Perú en 1823. Fue el primer jefe de Estado peruano en llevar el título de presidente de la república y en lucir la banda presidencial bicolor como distintivo del poder que ejercía. 

Una comisión integrada por los diputados Olmedo y Sánchez Carrión viajó a Guayaquil a solicitar la colaboración personal de Bolívar y se decretó la destitución de Riva Agüero, quien declaró ilegal al Congreso (19 de julio de 1823). Finalmente fue apresado por el coronel Antonio Gutiérrez de la Fuente y desterrado a Guayaquil en noviembre de 1823.

Fuente:

https://historiaperuana.pe/biografia/jose-mariano-riva-aguero

https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_de_la_Riva-Ag%C3%BCero

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

Crónicas de 2 siglos 1823-2023 – Nro. 37

Enero de 1823

Comenzamos el año con la cronica Nro 37 de 2 siglos. Poco se conoce sobre el extraordinario esfuerzo patriótico de los Caballeros Orientales (1822-1823) por ver a su Patria libre de los portugueses y brasileños. Este enero de 1823 es clave.

1 de enero

Elección de los miembros del nuevo Cabildo de Montevideo

Se procede a la elección de los miembros del nuevo Cabildo denominado “Representante“ con figuras que muestran su oposición al régimen imperial brasileño y participará de futuro en la independencia de la Provincia. Lo integran Silvestre Blanco, Manuel y Luis Eduardo Pérez y Juan Francisco Giró junto con otros vecinos de Montevideo. 

3 de enero

El Cabildo de Montevideo resuelve asumir el “gobierno civil” de la Provincia Oriental

El Cabildo de Montevideo (electo el 31 de diciembre pasado) resuelve asumir el “gobierno civil” de la Provincia para lo que trata de contactarse con los gobernadores y jefes militares de Buenos Aires, Entre Ríos y Santa Fe procurando un efectivo apoyo político y militar.

3 de enero

Lecor pone sitio a la capital ocupada por las fuerzas de da Costa.

4 de enero

Misión a Buenos Aires del Cabildo de Montevideo

El Cabildo montevideano siguiendo con su actitud de liberación de la Provincia envía ante el gobierno de Buenos Aires una misión integrada por Echevarriarza, Vázquez y Pereira para gestionar su solidaridad, contribuyendo con soldados y recursos financieros. Fracasan en sus gestiones de apoyo por parte del Gral. Martín Rodríguez y su ministro Bernardino Rivadavia. 

4 de enero

Lavalleja es nombrado jefe militar de las divisiones orientales que desde Santa Fe intentaban organizar la invasión de la Provincia.

Lavalleja es nombrado jefe militar de las divisiones orientales que desde Santa Fe intentaban organizar la invasión de la Provincia. Los Caballeros Orientales, mayoría del Cabildo de 1823 emprenden una política de desobediencia a Lecor a través de los periódicos La Aurora, El Pampero y El Piloto, autorizados por da Costa.

4 de enero

Santa Anna se le une el Gral. Guadalupe Victoria junto a otros enemigos de Iturbide

En México, a Santa Anna se le une el Gral. Guadalupe Victoria (1786-1843) junto a otros enemigos de Iturbide. Derrotas en Jalapa, obligaron a replegarse en Veracruz. La participación de otros jefes militares enviados por Iturbide para acabar con la revolución (pero que se pasaron a este bando) lo obligarán a abdicar.

7 de enero

Lecor reacciona en contra del Cabildo de Montevideo

Lecor reacciona contra el Cabildo declarándolo una “autoridad intrusa y delincuente y que sus órdenes, acuerdos, actos de cualquier clase que sea, son írritos, nulos, atentatorios y subversivos del orden”.

9 de enero

Instrucciones a los diputados del Cabildo en misión a Buenos Aires.

Los diputados reciben instrucciones para conseguir auxilios. «“Espoleados por la necesidad de auxilios y alentados por la prédica periodística bonaerense y por las recordadas palabras de Rivadavia, los capitulares montevideanos decidieron enviar a Buenos Aires a la precitada diputación a la cual, conjuntamente con sus poderes se le entregaron, el 9 de enero -como poco antes dijimos-, las instrucciones para un desempeño competente de sus gestiones.» 

13 de enero

Se le expone el plan al Brg. Gral. da Costa

Se le expone el plan al Brg. Gral. da Costa. Ligada así la acción del Cabildo con las comunicaciones a Santa Fe y a Buenos Aires, de cuyos comisionados en 13 de enero se recibieran noticias favorables a la empresa promovida, el plan proyectado fue claramente expuesto al comandante portugués Alvaro Da Costa.

19 de enero

Batalla de Torota

La batalla de Torata fue un enfrentamiento de la guerra de independencia del Perú, ocurrido el 19 de enero de 1823 en las alturas de Torata (pueblo ubicado al noreste de Moquegua) entre el Ejército Libertador del Sur al mando del general argentino Rudecindo Alvarado y el Ejército Real del Perú al mando del brigadier Jerónimo Valdés y que culminó con la derrota independentista cuyo ejército sería completamente destruido dos días después en la Batalla de Moquegua. 

https://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_Torata

20 de enero

Lecor toma drásticas medidas contra los cabildantes de Montevideo.

Desde su Cuartel general en San José, Lecor toma drásticas medidas contra los cabildantes, declarando a Montevideo bloqueada e incomunicada. Por tanto en la fecha sitia Montevideo, en manos del Brg. Gral. Alvaro da Costa fiel a Portugal y simpatizante de los orientales independentistas.

21 de enero

Batalla de Moquegua

La Batalla de Moquegua fue un encuentro bélico de la guerra de independencia del Perú, que tuvo lugar el 21 de enero de 1823 en las inmediaciones de la villa de Moquegua, capital del departamento del mismo nombre, durante este enfrentamiento el Ejército Libertador del Sur al mando del general argentino Rudecindo Alvarado fue completamente destruido por el Ejército Real del Perú al mando del general José de Canterac. La batalla de Moquegua significó el fin del ejército unido chileno-argentino que cruzara los Andes, liberara Chile y a cuya cabeza proclamará don José de San Martín la independencia peruana el 28 de julio de 1821, en adelante dejaría de existir como una fuerza efectiva de combate.

Los campos de Moquegua se van llenando de cadáveres.  Solo quedan 80 granaderos de los 400 originales al mando de Lavalle que cubrían la retirada. Juan Galo de Lavalle observa la situación, y duda si volver a cargar. Están agotados, hay heridos, con sus caballos sin fuerzas. Al final de esta campaña, que significó un serio descalabro para los independentistas, de los 4.300 hombres que partieron de Lima solo retornaron aproximadamente 1.500.

22 de enero

Manifiesto del Cabildo Representante de Montevideo a los pueblos de la Provincia Oriental contra la dominación portuguesa.

«“Pueblos! Responded vosotros. Por lo que hace al de Montevideo y extramuros, que es actualmente toda la parte libre de la provincia, su Cabildo Representante declara solemnemente, que detesta la dominación, ó incorporación del Brasil: que aborrece, y jura perseguir de muerte á los desnaturalizados hijos del pais, que trabajan por esclavizarlo: que echara mano de las armas para hacer encarnizadamente la guerra á las tropas del Brasil, mientras ellas no desistan de sus injustas y vanas pretensiones; y que perecerán todos, Americanos y Españoles sepultados entre las ruinas de la PATRIA, antes que tolerar la ejecución de esos planes concebidos por la ambición y la perfidia para ignominia, degradación; y muerte de los hombres libres.

“Digan enhorabuena esos perversos, esos traidores, que nosotros, nuestros electores, y todo el pueblo de Montevideo es anarquista y faccioso.

“Montevideo y todos los pueblos de la campaña conocen demasiadamente, quienes son los que merecen aquellos oprobiosos nombres: saben que estos son los que justamente corresponden á esos viles agentes del Ministerio del Brasil; pero tiemblen ellos al aguardar el dia de la PATRIA. Oh! no está muy lejos. Entonces caerà sobre sus cabezas con la maldición eterna de los pueblos, la cuchilla de su justicia; y entonces reconocerá ese Emperador el poder é influjo de sus adictos, y las falsedades con que lo tienen alucinado.

“Entretanto. Pueblos de la campaña! ¡Soldados del País! guardaos para aquel momento. Proseguid afectando esa apatía, y mentida ignorancia, en que reposan los tiranos, y en la que indudablemente estriba la salvación de la PATRIA; pues el Cabildo Representante de Montevideo os asegura, que no está distante el dia en que empleis con seguridad vuestros esfuerzos, para abrazar después a vuestros padres, hermanos, esposas, é hijos, diciéndoles bañados en lágrimas de ternura: al cabo ha querido el Cielo, que rompiésemos para siempre nuestras cadenas, al cabo hemos recobrado nuestra dulce libertad para que seais, hijos, felices; ella está sellada con nuestra sangre, y este será el monumento eterno que os recuerde la UNIÓN, que debe constantemente estrecharos para conservarla”.»

23 de enero

El Cabildo ante solicitud expresa de Lavalleja (que estaba en Buenos Aires) lo nombra Tte. Cnel. con mando en las tropas orientales aunque bajo órdenes de los delegados Blanco, Pérez y Giró.

26 de enero

Oficio del Brg. Gral. da Costa al Cabildo de Montevideo anunciando su posición y la de los Voluntarios del Rey (tropa a su mando) en ese momento en que se agudizaba la lucha con Lecor.

28 de enero

El emperador D. Pedro I ordena que las tropas portuguesas que permanezcan en Montevideo se embarquen de inmediato.

28 de enero

El gobierno de Buenos Aires reprocha a Mansilla su decisión del Tratado con Lecor que demostraba una tolerancia y fraternidad hacia el Brasil poco conveniente en esas circunstancias.

El gobierno de Buenos Aires reprocha a Mansilla su decisión del Tratado con Lecor que demostraba una tolerancia y fraternidad hacia el Brasil poco conveniente en esas circunstancias. El tema central estaba en que estando la política exterior del país en manos de Buenos Aires, Mansilla estaba aceptando la ocupación de la Provincia Oriental por el Brasil como un hecho. Además violaba el espíritu del Tratado del Cuadrilátero sobre cooperación activa entre las Provincias firmantes.

28 de enero

Abdicación de Bernardo O’Higgins como Director Supremo de Chile 

En Santiago se supo que las tropas de las provincias de Coquimbo y de Concepción marchaban ya hacia la capital. Estas noticias intranquilizaron a la población que vio la cercanía de una guerra civil con las consecuencias que todos imaginaban. Ante esto el gobernador intendente de Santiago, José María de Guzmán. En la noche del 27 de enero reunió en su hogar a los más connotados patricios para dar los últimos arreglos a un plan revolucionario destinado a derrocar al Director Supremo para así evitar el enfrentamiento con las otras provincias. Luego de un intercambio de opiniones entre los miembros de la comisión y O’Higgins, este accedió en deponer el mando de inmediato en la autoridad que nombrará el Cabildo abierto. Viaja a Perú y arribó a El Callao el 28 de julio siendo recibido por las autoridades limeñas presididas por el marqués de Torre Tagle, amigo de la infancia y condiscípulo. Se instaló con su familia en Lima en la misma residencia en que había vivido el general San Martín cuando estuvo en esa, en la calle Jesús María.

https://es.wikipedia.org/wiki/Bernardo_O%27Higgins

29 de enero

La delegación del Cabildo insiste ante Rivadavia por ayuda de Buenos Aires a la Provincia Oriental,

La delegación del Cabildo insiste ante Rivadavia por ayuda de Buenos Aires a la Provincia Oriental, Rivadavia no quiere arriesgar la guerra con Brasil por el apoyo a los orientales

30 de enero

Lecor bloquea Montevideo como forma de obligar a da Costa a su abandono.

Lecor bloquea Montevideo como forma de obligar a da Costa a su abandono. Los patriotas orientales se muestran partidarios de este último.

Fuentes:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

Historia General de las Relaciones Exteriores de la Argentina (1806 – 1989). Carlos Escude, 2015

Campos de Garabello, La Revolución Oriental de 1822-1823

Wikipedia

Crónicas de 2 siglos 1822-2022 – Nro. 36

Diciembre de 1822

Los Caballeros orientales – La resistencia a la ocupación luso-brasileña de la Provincia Oriental – 1822-23 

En septiembre se ha declarado la independencia del Brasil de Portugal. Se baten dos bandos: los que están a favor de Pedro I o los que siguen fiel a Portugal. En este escenario político aparecen Los Caballeros Orientales, logia que en el secreto de sus reuniones mantenía encendida la llama de la rebeldía contra el régimen dominante. Numerosos orientales que se encontraban en Buenos Aires vuelven a Montevideo y publican dos periódicos: La Aurora y El Pampero desde los cuales incitan al pueblo a formar un Cabildo abierto:» con el fin de resolver la forma de gobierno que afiance la seguridad individual y haga poner en vigor los derechos usurpados a los dignos orientales por una fracción que dirigió un congreso nulísimo en Buenos Aires(…)debe ser decisión nuestra, porque allí están los hijos de nuestros padres, y no en el  territorio del Brasil…»

1 de diciembre

Prosiguen en la Provincia Oriental las actividades revolucionarias en contra de la ocupación.

Juan Antonio Lavalleja aparece en la lista de desertores y después de un intento de reunirse con patriotas en Tacuarembó, atravesó el río Uruguay y se instaló en Entre Ríos.

Mientras tanto prosiguen en la Prov. las actividades revolucionarias y Tomás de Iriarte como delegado de los Caballeros Orientales gestiona en Buenos Aires ante el ministro de Relaciones Bernardino Rivadavia el apoyo del gobierno porteño.

Simultáneamente con el pronunciamiento del Cabildo Juan Antonio Lavalleja, que estaba en las ramificaciones que tenía la conspiración en la campaña, fue delatado en los primeros días de octubre como lo consigna una carta dirigida por doña Consolación Obes a su hermano Lucas, diputado en la corte de Río de Janeiro en la  que dice: “… El Sr. Lavalleja está con los Independientes de la plaza, fue delatado y afugado con quarenta hombres…”.

Perseguido por Rivera, se anota su deserción en la lista de revista del 1o. De diciembre, junto con su hermano Manuel, que lo había hecho el 28 de noviembre.

Lavalleja buscó reunirse con su gente en el Rincón de Clara, en Tacuarembó, pero al fracasar en su intento, debió seguir hasta las costas del Uruguay para refugiarse en Entre Ríos. Por tanto, es apócrifa la firma de Lavalleja que aparece en el acta de aclamación al emperador suscrita el 17 de octubre por los dragones de la Unión en el arroyo de la Virgen, tal como lo sospechó Silva Valdés en uno de sus importantes trabajos.

Fuentes:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

1 de diciembre

Pedro I es coronado emperador constitucional  y Defensor perpetuo del Brasil.

El príncipe fue proclamado emperador, con el nombre de Pedro I, el día de su vigésimo cuarto cumpleaños, que coincidió con la fundación del Imperio de Brasil.​ Su coronación tuvo lugar en la Iglesia de Nuestra Señora del Monte Carmelo (Río de Janeiro). Su ascensión al trono, sin embargo, no se materializó de inmediato en todos los territorios brasileños, sino que tuvo que forzar la sumisión de varias provincias en las regiones Norte, Nordeste y Sur; de hecho, las últimas unidades leales a Portugal no se rindieron hasta comienzos de 1824.

Participantes: Pedro I

Fuentes:

https://es.wikipedia.org/wiki/Pedro_I_de_Brasil_y_IV_de_Portugal

2 de diciembre

Plan de Veracruz (México)

El Gral. Antonio López de Santa Anna (1791-1876) desde Jalapa se subleva contra Iturbide y proclama la República Mexicana en contra de Iturbide y a favor de la república apoyando a Guadalupe Victoria. Santa Anna prometió seguir los principios del Plan de Iguala, se dirigió a la población con los siguientes argumentos:

  • Dijo que cuando el país se había emancipado en busca de su independencia se había buscado igualdad, justicia y razón.
  • México había elegido un gobierno representativo a través de un Congreso que había sido disuelto por Iturbide.
  • El objetivo de su proclama era restituir una asamblea representativa de la nación.
  • Se respetarían los principios del Plan de Iguala y se consideraría reo de esa nación a quien atentase contra sus principios. Se firmaría un armisticio con las fuerzas realistas que permanecían en el castillo de San Juan de Ulúa.
  • Se restablecería la libertad de giro marítimo con la península.

Participantes: 

Antonio López de Santa Anna, Guadalupe Victoria

Fuentes:

https://es.wikipedia.org/wiki/Plan_de_Veracruz_(1822)

El General Antonio López De Santa Anna proclama el Plan de Veracruz 

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

Plan de Vera Cruz

6 de diciembre

Retiro de las fuerzas realistas del norte Argentino, fue la última invasión. (Guerra en el Norte)

El Gral Olañeta realizó la última incursión en suelo argentino en junio de 1822, llegando hasta Volcán (40 kilómetros al norte de Jujuy). El 6 de diciembre de 1822 se retiró de territorio argentino finalizando la última invasión realista. Su fuerzas permanecieron, sin embargo, ocupando algunos pueblos fronterizos, tales como Santa Victoria Oeste.

Hasta 1822 se habían registrado en territorio argentino doscientos treinta y seis combates, habiendo muerto por acción de la guerra un tercio de la población masculina de Jujuy.

Participantes: Olañeta

Fuente:

https://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_gaucha

6 de diciembre

Mansilla da a conocer una Proclama al pueblo de Entre Ríos sobre la inquietud de los portugueses de un posible pasaje de tropas entrerrianas a la Provincia Cisplatina.

Participantes: Lucio Mansilla

Fuentes:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

8 de diciembre

Mansilla insiste ante Rodríguez sobre la necesidad de ayudar a los orientales y de que Lavalleja vaya a Buenos Aires para explicar la situación.

Fuentes:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

10 de diciembre

El gobernador de Entre Ríos, Mansilla, envió al campamento general del Brg. Lecor en San José como comisionado suyo, al oriental sargento mayor Juan Florencio Perea (que aunque era su asesor, estaba al servicio del Imperio como agente secreto) a firmar un tratado por el que ambos gobiernos se mantendrían en absoluta neutralidad. Esto excluye toda posibilidad que Mansilla apoyará los planes orientales de revolución, pese a las anteriores promesas hechas a Lavalleja.

Perea llega a San José como comisionado de Mansilla, para llevar adelante un proyecto de convenio (datado el 9 de diciembre en Entre Ríos) que asegure “de un modo sólido, la tranquilidad y buena armonía de ambos Estados”.

En términos generales a través de 6 importantes artículos se establecía: límites territoriales, retiro de los exilados entrerrianos de la frontera del Uruguay, no prestación de ayuda ni protección a los orientales que intentasen perturbar la Prov. Cisplatina, para los robos de ganado, respeto a las propiedades de campos en la frontera y finalmente no declarar la guerra.

Fuentes:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

11 de diciembre

Tratado de Neutralidad, amistad y buena armonía entre el capitán general de la Provincia Cisplatina y el Gobernador de Entre Ríos.

Lecor añade de que se deben eliminar las pretensiones bélicas que pudiese tener Entre Ríos contra la Cisplatina y sobre todo “no dar auxilio a los caudillos que refugiados de un lado y del otro pretendan la agresión armada”.

Aceptadas por Perea se firma el Convenio de San José integrado por dos partes: la proposición de Mansilla y las ampliaciones de Lecor.

Ambos Gobiernos se obligan a no dar auxilio alguno, directa ni indirectamente, a los caudillos y demás personas que se hallan refugiados, o que en adelante se refugiaren en cualquiera de los dos territorios, por haber conspirado contra el orden y la tranquilidad pública, impidiendo toda agresión que intenten hacer con fuerza armada.

Ambos Gobiernos respetarán la línea de límites de los dos territorios, y se obligan a no traspasarla con fuerza armada, por ningún motivo, durante la amistad y buena armonía que prometen guardar, conservar y mantener por todos los medios posibles; ni mezclarse, directa ni indirectamente, en las disensiones políticas interiores que puedan suscitarse en cualquiera de dichos territorios (1).

La vigencia de este tratado impulsó a los disidentes uruguayos a creer (erróneamente) que no podrían contar con el auxilio entrerriano. En cuanto a la provincia de Corrientes, los disidentes orientales prescindieron de enviar un delegado allí ya que supusieron que ella seguiría el ejemplo de las otras provincias firmantes del tratado del Cuadrilátero, debido a que, por su pequeña importancia y su situación geográfica más alejada respecto de la Provincia Cisplatina, ajustaría su proceder a la conducta que le indicasen las provincias de Buenos Aires y Santa Fe.  

Ver el tratado aquí.

Fuentes:

Historia General de las Relaciones Exteriores de la Argentina (1806 – 1989). Carlos Escude, 2015

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

16 de diciembre

El Cabildo de Montevideo, a iniciativa de Cristóbal Echevarriarza, se pronuncia contra el gobierno de Lecor. Se inician las acciones de los “Caballeros Orientales”, facción decidida a aprovechar las circunstancias para separarse del Brasil, pero con dos opciones: la independencia absoluta o la unión con Buenos Aires.

16 de diciembre

Rivadavia renuente a apoyar la gestión de los orientales, contesta que tiene dos problemas que resolver: la situación interna de Brasil y la de la Provincia de Buenos Aires atacada por los indios.

El cabildante Cristóbal Echevarriarza expone ante el cuerpo su punto de vista con respecto a la incorporación al Brasil, que es apoyado por unanimidad de sus miembros. Con argumentos contundentes sostiene que la incorporación de la Prov. Oriental al Brasil sólo podía ser hecha por un Cabildo que representase con libertad la voluntad de los vecinos.

Simultáneamente se le comunicaba a Lecor que quedaba “suspendida la obediencia de autoridad” y en cuanto a las funciones del síndico procurador del Estado, Tomás García de Zúñiga se le desconocían en el mismo acto.

Entre tanto en Montevideo, los “Caballeros Orientales” aprovechando el creciente antagonismo entre Lecor y Alvaro da Costa y a favor de la tolerancia de este úitimo, crecían en sus propósitos independentistas. Uno de sus miembros, Cristóbal Echevarriarza, en sesión del Cabildo del 16 de diciembre de 1822 hizo una clara y terminante exposición de la situación imperante, señalando el grave compromiso en que se hallaban las autoridades y el vecindario de Montevideo ante aquella pugna entre los poderes de Portugal y Brasil “extraños” por igual a la Provincia.

“La incorporación de ella —añade—, propuesta por el dicho Congreso Cisplatino (prescindiendo de lo que puede decirse sobre su legitimidad) fue al Reino Unido de Portugal, Brasil y Algarbe; este reino unido no existe de hecho”.

“La incorporación de esta Provincia —prosigue Echevarriarza—, y especialmente a un nuevo Estado, no puede ser legitimada si no por un acto público de un Congreso regular que exprese el voto libre de sus habitantes”; y termína proponiendo la reunión de este Congreso representativo de la parte de la Provincia no dominada por las fuerzas de Lecor, esto es, Montevideo y sus alrededores. Por unanimidad el Cabildo aprobó la convocatoria de aquella Asamblea, recábando para ello la anuencia del Consejo Militar portugués presidido por el brigadier da Costa; igualmente resolvió negar obediencia a Lecor, y desconocer la autoridad del Síndico Procurador García de Zúñiga.

En: Castellanos, o.c.

“Pero el rumbo de los acontecimientos estaba tomado y la autoridad capitular, en 16 de diciembre, después de oír la palabra autorizada de su Regidor don Cristóbal Echeverriarza, quien precisó exactamente la situación producida por la separación del Brasil y Portugal, hecho que anulaba las resoluciones del Congreso de 1821, decidía el desconocimiento absoluto de la autoridad de Lecor y del Brasil en el territorio nacional, y la celebración inmediata de una Asamblea elegida popularmente, la cual debería reasumir los destinos del Estado Oriental.49 A esta declaratoria, y como complemento de ella, se siguieron dos actos de singular importancia: uno, la convocatoria del congreso elector; el otro, la comunicación del Cabildo, apoyada en los mismos términos, con iguales propósitos, por otro oficio suscrito por el vecindario de la ciudad, y que era dirigido al gobernador de la Provincia vecina de Santa Fe, don Estanislao López, enterándolo de las medidas adoptadas de la próxima instalación de “una Asamblea de diputados del pueblo que proclamaría su libertad e independencia y solicitando, tan sólo, el auxilio de algunas fuerzas para que la Banda Oriental saliese a su encuentro en masa, reproduciéndose así —decían— las épocas de las primeras glorias”.50

La Asamblea Nacional no llego a reunirse, pero citado el pueblo a comicios para la formación de una corporación que remplazase las funciones del Cabildo, cuyo mandato expiraba el 31 de diciembre, resultó electa la nueva autorida que, por el carácter investido, denominóse “Cabildo representante”.51 Fue su primer acuerdo la ratificación plena de las resoluciones de 16 de diciembre desconociendo la autoridad de Lecor y el nombramiento de una comisión especial, la cual tomaría para sí aquellas atribuciones de carácter político inherentes a los capitanes generales y su perintendentes de Provincia. Esa Comisión especial quedó compuesta por los regidores, don Manuel Pérez, don Juan Francisco Giró y don Luis Eduardo Pérez. Acto seguido y por decisiones consecutivas, se dispuso la publicación de un manifiesto al país, que lo enterara de los fines perseguidos, y el envio de dos delegaciones, una a Buenos Aires, compuesta por don Santiago Vázquez, don Gabriel A. Pereira y don Cristóbal Echeverriarza, y otra a Santa Fe, formada por don Luis Eduardo Pérez y don Ramón de Acha, a quienes se dieron facultades bastantes a fin de solicitar, de los respectivos gobiernos provinciales, la cooperación y auxilio en los propósitos perseguidos. 

(49) La Declaración del Cabildo de 16 de diciembre de 1822 mandada publicar y repartir en todo el país, por la misma autoridad, levaba la firma de Carlos Camusso, José María Roo, Gabriel Pereira, Francisco Farías, Bernardo Susviela, Cristóbal Echeverriarza, Agustín Aldecoa y Estanislao García de Zúñiga.

(50) Copiador original en Archivo General Administrativo. Las notas fueron publicadas por Lasaga: “Historia de López”, páginas 505 y siguientes.

(51) Producido el desconocimiento de la autoridad de Lecor por el Cabildo, éste comunicó la resolución de 16 de diciembre al Consejo Militar compuesto de Jefes portugueses, quienes, si aprobaron la medidas de ruptura con el Brasil, formularon ciertas reservas sobre la convocatoria de una Asamblea Nacional. El Cabildo, en sesión de 24 de diciembre, creyó menester postergar la elección de ese cuerpo, aun cuando la nueva autoridad capitular derivase su mandato del pueblo, conlo cual se obviaban las dificultades puestas por los portugueses. (Documentos Inéditos. Archivo General Administrativo. Acta de 24 de diciembre de 1822).

En: Blanco Acevedo, o.c.

Fuente:

Cronología Histórica documentada del Uruguay. Walter Rela

19 de diciembre

El Cabildo de Montevideo envía a otro comisionado, Domingo Cullen (miembro de los Caballeros Orientales) con ánimo de sondear el apoyo porteño.

Lecor aumenta las medidas represivas. Nicolás Herrera le escribe a Rivera noticiándole lo ocurrido con el tratado de amistad con Mansilla, añadiendo que “si se descubre el paradero de Lavalleja avísemelo, el infeliz está perdido porque en Entre Ríos no tendrá cabida.

Fuentes:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

23 de diciembre

Rivadavia se presenta ante la Sala de Representantes de la Provincia de Buenos Aires para informar sobre la situación política en la Prov. Oriental.

Fuentes:

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3

Del 26 al 28 de diciembre

Un importante grupo de orientales se dirigen al gobernador de Santa Fe, Estanislao López, pidiendo auxilio para emprender la campaña de libertar a la Provincia Oriental de los portugueses. El Cabildo de Montevideo apoya la iniciativa.

No tenían fuerzas ni recursos suficientes los patriotas de Montevideo para continuar la lucha una vez que desapareciera el concurso de las tropas portuguesas.

Y resolvieron dirigirse a las provincias hermanas. Dió la señal un grupo constituido por los siguientes ciudadanos: Juan Francisco Giró, José María Platero, Daniel Vidal, Manuel Vidal, Gregorio Pérez, Manuel Oribe, Ramón Castriz, Pablo Zufriatetegui, Ramón de Acha, Silvestre Blanco, Francisco Araucho, Antonio de Chopitea, José Félix de Zubillaga, Francisco Aguilar, Gabriel A. Pereira, Atanasio Aguirre, Pablo Antonio Nieto, Pedro Lenguas, Lorenzo J. Pérez, Francisco Solano Antuña, Juan B. Blanco, Roque Graceras, Luis E. Pérez, Francisco Lecocq, Juan Zufriategui, Santiago Vázquez, Antonio Acuña, Gregorio Lecocq, D. F. Benavente, León J. Ellauri, Agustín Aldecoa, Rafael Sánchez Molina. Extractamos de la representación que el mencionado grupo dirigió al gobernador de Santa Fe, el 26 de diciembre de 1822 (“Lasaga, Historia de López”).

“Una porción de vecinos respetables del pueblo patriota de Montevideo y su campaña, animados por el sentimiento de su libertad e inspirados por el amor a su país, despreciando los riesgos y compromisos en que los coloca su situación, eleva ante V. E. la voz clamorosa de la Patria, e implora de la generosidad de sus hermanos los santafecinos su poder y auxilio para la salvación de la tierra que no pueden esperar de

sus propios esfuerzos. El momento ha llegado, Excelentísimo Señor, de dar la libertad a la Banda Oriental y arrojar de nuestro suelo un enemigo que sólo pudo ocuparlo a la sombra de nuestras disensiones. Él a su vez empieza a sentir los elementos de la discordia que la razón ya sofocó entre nosotros, y dándonos en su confusión un auxilio poderosísimo nos ofrece un triunfo fácil y un vasto campo de gloria al esfuerzo y patriotismo de nuestros hermanos. La Provincia no cuenta hoy más enemigos que un número inconsiderable de continentales que colocados en medio de una población guerrera que arde en deseos de vengar los ultrajes de su honra y el saqueo de sus propiedades, mantienen insolentes los principios de dominación que no quieren para sí… La División europea de Voluntarios Reales aspira sólo a regresar a Europa, se mantiene en una completa separación de las tropas del continente, y no teniendo interés en conservar el país, lejos de mezclarse con la guerra que suscitase la insurrección, vería con placer secreto nuestros esfuerzos en arrancar la tierra a la dominación de un enemigo que nuestros intereses hacen común. Un cuerpo de quinientos hombres que atravesase el Uruguay, sería más que suficiente para realizar nuestras esperanzas. La noticia de hallarse en esta Banda, sería la señal de una insurrección general, que distrayendo por todas partes la atención de nuestros enemigos, apoyaría los movimientos parciales de la población. La Banda Oriental en masa saldría al encuentro de sus libertadores, y reproduciendo unidos la época de nuestras primeras glorias, libertaremos nuestro suelo del peso de una dominación que lo degrada”. Agregaban los firmantes al general López, que análoga solicitud habían elevado al Gobierno de Buenos Aires; pero que la formalidad y circunspección con que dicho gobierno quería proceder podían dar lugar a malograr los mejores momentos.

Dos días después, resolvía el Cabildo de Montevideo robustecer la representación de los orientales. Extraemos de su oficio al gobernador de Santa Fe de 28 de diciembre de 1822 (Lasaga, “Historia de López”): “El Cabildo aparta la vista de aquella época infeliz en que los extranjeros ambiciosos, conducidos por la anarquía, establecieron su odioso yugo en la patria de tantos bravos. Pero supone a V. S. instruido de que con pocas, aunque con vergonzosas excepciones, sus habitantes americanos se conservaron dignos de este nombre y no se prostituyeron por el oro ni la intriga. Tampoco se fija el Cabildo en la época en que añadiendo la desvergüenza a la tiranía, se quiso justificar una violencia con otra violencia mayor para fundar la pretendida incorporación a su territorio; y sólo la recordará para protestar, como lo hace, la nulidad del supuesto Congreso y de todos sus actos tramados por la intriga y sostenidos por la violencia… Los acontecimientos públicos de que V. S. estará instruido manifiestan la feliz divergencia de intereses entre la División de Voluntarios Reales y las tropas del continente del Brasil, de que ha resultado que la mayor parte de aquéllas hayan quedado ocupando esta plaza con el empeño de embarcarse para Lisboa o Bahía de todos los Santos licenciándose el resto, y que el general Lecor subsista en la campaña con los brasilenses”.

En: Eduardo Acevedo, o.c.

Walter Rela, Cronología Histórica documentada, Tomo 3